La música es un lenguaje universal que trasciende barreras y conecta a todas las personas. En Medellín, el programa “Soy Músico” de la Orquesta Filarmónica ha demostrado durante ocho años cómo la sinfonía puede convertirse en una poderosa herramienta de inclusión para jóvenes neurodivergentes. Esta iniciativa no solo potencia habilidades musicales, sino que desafía prejuicios y promueve la inclusión cultural en toda Latinoamérica.
Origen e historia del programa ‘Soy Músico’
Fundamento y objetivos
“Soy Músico” nació hace ocho años con la misión de brindar formación musical a personas jóvenes con condiciones como autismo, síndrome de Down y otras neurodivergencias. La idea surgió de la necesidad de ofrecer espacios de desarrollo artístico a quienes, tras la infancia, pocas opciones educativas especializadas encontraban. Desde entonces, más de 30 participantes reciben acompañamiento continuo para explorar su talento y expresarse a través de la música.
Crecimiento y reconocimiento
Con el paso del tiempo, el programa se ha estructurado en tres niveles: dos grupos de base para quienes inician su formación y un grupo de proyección para quienes avanzan hacia un nivel casi profesional. Cada año, estos jóvenes presentan sus aprendizajes junto a la Orquesta Filarmónica de Medellín, compartiendo escenario en conciertos públicos. En 2024, la orquesta recibió el premio LEAD® Kennedy Center, destacando el compromiso del programa con la accesibilidad y la inclusión en las artes.
Impacto en jóvenes neurodivergentes
Desarrollo de habilidades musicales y sociales
Además de dominar técnicas instrumentales, las y los participantes adquieren destrezas cognitivas, motoras y emocionales. La musicoterapia facilita la mejora de la coordinación, la concentración y la comunicación, al tiempo que fortalece la autoestima y el sentido de responsabilidad.
Estrategias y metodología del programa
Musicoterapia y formación profesional
El equipo de cuatro musicoterapeutas y músicos de la Orquesta trabaja en colaboración para adaptar partituras y ejercicios a las necesidades de cada persona. Las sesiones se extienden a lo largo de diez meses anuales, permitiendo un proceso gradual y personalizado que respeta los ritmos de aprendizaje.
Integración con la Orquesta Filarmónica
Más allá de las clases, el contacto directo con profesionales sinfónicos en ensayos y conciertos es un componente clave. Esta convivencia promueve la inclusión social y ofrece un modelo real de trabajo en equipo, donde cada integrante aporta su singularidad al conjunto.
Beneficios para la inclusión cultural en Latinoamérica
Rompiendo barreras y estigmas
Al visibilizar a jóvenes neurodivergentes en escenarios públicos, “Soy Músico” desafía mitos sobre la incapacidad y muestra que la diversidad cognitiva enriquece la creación artística. Este ejemplo inspira a otras instituciones culturales a repensar sus prácticas inclusivas.
Inspirando iniciativas similares
El éxito de Medellín ha generado interés en países vecinos. Organizaciones de Colombia, México y Argentina analizan el modelo para replicar talleres de musicoterapia inclusiva, consolidando una red de proyectos que impulsen la inclusión cultural en toda la región.
Cómo replicar el modelo en otras regiones
Pasos para implementar un programa inclusivo
- Diagnóstico de necesidades: identificar grupos neurodivergentes locales y sus expectativas.
- Alianzas estratégicas: colaborar con entidades como centros de rehabilitación, fundaciones y escuelas de música.
- Formación de profesionales: capacitar musicoterapeutas y músicos en enfoques inclusivos.
Recursos y alianzas estratégicas
En Medellín, “Soy Músico” trabaja con Casa Taller Artesas, Comfama, el Comité de Rehabilitación y Fundación Azul Ilusión. Estos aliados aportan espacios, recursos y redes de apoyo, garantizando sostenibilidad y alcance comunitario.
El programa Música y neurodivergencia: ‘Soy Músico’ de la Filarmónica de Medellín demuestra que la inclusión va más allá de la accesibilidad física: implica ofrecer oportunidades reales de desarrollo personal y cultural. Al adaptar la formación musical a las necesidades de jóvenes neurodivergentes, se construye una sociedad más justa, empática y creativa. ¿Qué piensas de esta iniciativa? ¡Dejanos tu comentario! Te invitamos a leer nuestro artículo: Libros adaptados al Braille: rompiendo barreras y fomentando la inclusión

