En un mundo donde la diversidad funcional es la norma, el diseño inclusivo en productos de uso doméstico se ha convertido en una prioridad para garantizar que todas las personas, independientemente de su edad o condición, puedan desenvolverse con autonomía y seguridad en su propio hogar. Desde utensilios de cocina hasta muebles de baño, los artículos diseñados bajo principios inclusivos no solo benefician a quienes tienen movilidad reducida o condiciones temporales, sino que mejoran la experiencia de uso para todas las personas usuarias.

¿Qué es el diseño inclusivo y por qué importa en el hogar?

El diseño inclusivo va más allá de la accesibilidad: busca crear productos que respondan a la mayor diversidad de capacidades desde su concepción. A diferencia del diseño tradicional, que suele adaptarse a necesidades estándar y deja fuera a grupos específicos, el enfoque inclusivo integra la diversidad humana como punto de partida. En el entorno doméstico, esto significa pensar en personas mayores, con movilidad reducida, con dificultades sensoriales o con fuerza limitada, pero también en familias con niños pequeños o con mascotas que requieren soluciones versátiles.

Implementar diseño inclusivo en el hogar no solo es un acto de equidad, sino una oportunidad de innovación: los productos resultantes suelen ser más intuitivos, seguros y atractivos para un público mucho más amplio, ampliando el mercado y reforzando la reputación de las marcas comprometidas con la responsabilidad social.

Beneficios clave de los productos inclusivos en el hogar

Autonomía y seguridad

Los productos domésticos diseñados inclusivamente permiten que más personas realicen tareas cotidianas sin depender de ayuda externa. Por ejemplo, mangos ergonómicos, superficies antideslizantes y mecanismos de fácil apertura reducen el riesgo de caídas y accidentes, al tiempo que fomentan la independencia.

Versatilidad y adaptabilidad

Un diseño inclusivo contempla diferentes modos de uso: muebles ajustables en altura, controles táctiles grandes o texturas contrastantes. Estas características sirven tanto a quienes tienen limitaciones permanentes como a quienes experimentan condiciones temporales (p.ej., tras una cirugía) o simplemente desean comodidad adicional.

Ventajas para fabricantes y mercado

Las empresas que apuestan por el diseño inclusivo pueden llegar a un mercado potencial de más de 1.000 millones de personas con discapacidad en el mundo, además de familias y personas mayores. Estudios muestran que estas compañías no solo mejoran su imagen de marca, sino que también obtienen ventajas competitivas y financieras al atender necesidades históricamente desatendidas.

Ejemplos de productos inclusivos versátiles

IKEA BÄSINGEN: una serie diseñada para la movilidad reducida

IKEA lanzó recientemente la colección BÄSINGEN, compuesta por seis productos pensados para ofrecer apoyo en el baño y otras estancias. Incluye taburetes con barandilla, asiento de ducha, barra toallero, repisa de ducha y porta‑rollos, todos con superficies antideslizantes, agarres ergonómicos y acabado oscuro para mejorar la visibilidad. Esta línea demuestra que la accesibilidad puede convivir con el estilo escandinavo, beneficiando tanto a personas con movilidad reducida como a familias y personas mayores.

Pottery Barn x Michael Graves: mobiliario accesible con estilo

Pottery Barn, en colaboración con Michael Graves Design, presentó una colección de muebles accesibles que incluye camas con reposabrazos integrados, mesitas de noche con tiradores grandes y cómodos, y cómodas con barras de agarre. Estos artículos combinan estética y funcionalidad, reforzando la idea de que la inclusión no está reñida con el diseño atractivo.

 

Cómo implementar el diseño inclusivo en productos domésticos

Investigación y co‑diseño con personas usuarias

Involucrar a un grupo diverso de personas usuarias desde las fases iniciales de ideación ayuda a identificar necesidades reales y a generar soluciones efectivas. Entrevistas, talleres participativos y pruebas de concepto aseguran que el producto final sea verdaderamente útil para quienes más lo necesitan 

Aplicación de principios de diseño universal

  1. Flexibilidad de uso: permitir múltiples formas de interacción (agarre, empuje, deslizamiento). 
  2. Simplicidad e intuición: controles y formas claras, sin necesidad de manuales complejos. 
  3. Visibilidad y contraste: colores y texturas que destaquen las zonas de interacción. 
  4. Tolerancia al error: mecanismos que minimicen el impacto de un uso incorrecto. 

Prototipado y pruebas de usabilidad

Desarrollar prototipos rápidos y someterlos a pruebas con personas de diferentes capacidades permite ajustar detalles críticos antes de la producción masiva. Esta fase reduce costes de rediseño y mejora la aceptación del producto en el mercado.

El diseño inclusivo en productos de uso doméstico no es una moda, sino una necesidad ética y de mercado. Al adoptar un enfoque centrado en la diversidad funcional, las marcas pueden crear soluciones versátiles que mejoren la vida diaria de todas las personas, desde quienes enfrentan barreras físicas hasta quienes simplemente buscan mayor comodidad. Ejemplos de empresas que le apuestan a la inclusión demuestran que la accesibilidad y el estilo pueden ir de la mano.

Es hora de que fabricantes, diseñadoras y tomadoras de decisiones se comprometan con la inclusión desde la concepción de cada producto, construyendo hogares más seguros, confortables y equitativos. ¿Qué piensas de estas tendencias en inclusión? ¡Dejanos tu comentario! Te invitamos a leer nuestro artículo: Accesibilidad en el transporte público: desafíos pendientes

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